CAUTELA. La doctora Zavaleta escribe sobre cómo está llegando el mensaje a las comunidades sobre el uso de fármacos usados contra el Covid-19.
Este virus se mueve más rápido de lo que nuestros dedos pueden “escribir” protocolos, guías, o comentarios. Estoy revisando datos de reportes antiguos sobre cómo fueron los contactos entre la población europea y la Indígena, y cómo se movieron los brotes infecciones entre comunidad y comunidad. Y escribo esto porque la información científica no se mueve tan rápido como el virus, se produce en el norte del planeta, con los ensayos clínicos, y a los países del sur va llegando en inglés, luego (tal vez usando el Google translator) lo pasamos al castellano, y donde hay un “filtro” que entiende la jerga médica, y sobre todo los conceptos de los riesgos de la automedicación, los riesgos del uso de jeringas, los riesgos de tomar anticoagulantes y corticosteriodes, allí lo entienden, lo explican y lo pasan a las ciudades de la Amazonia.
Es así como imagino ocurre el flujo de información. No quiere decir que las personas de la Amazonía no reciban la información directamente, quizá estoy asumiendo mucho, pido disculpas en ese caso. Lo que me preocupa es esto, ¿qué pasa con la información que llega a las comunidades indígenas?, ¿a los lideres Indígenas?, ¿a los que no son de las ciencias médicas, y que están con todas sus fuerzas tratando de que ningún pueblo indígena desaparezca?.
Escribo esto por lo que me dijo una lingüista: “cuando una lengua indígena desaparece, no es que simplemente deja de existir, implica que la han asesinado”. Por lo tanto, como medica peruana, y con el privilegio de haber estudiado en el extranjero y además conocer las comunidades Indígenas, pido a mis colegas hacer un alto para enfocar la estrategia de transmisión de mensajes que podrían ayudar a que la pandemia, tenga un menor impacto negativo en las comunidades indígenas, que ayude a que no desaparezcan; y que aquellos que sigan viviendo, no incrementen su desconfianza en el Estado y en la medicina occidental.
¿Qué pasa con la información que llega a las comunidades indígenas?, ¿a los que están con todas sus fuerzas tratando de que ningún pueblo desaparezca?.
Escribo también este artículo porque vi una foto del Presidente con una bolista del kit de covid-19. Si bien se especifica que tiene que ser bajo supervisión, cuántos personas entienden que la supervisión significa que un médico lo supervise.
De otro lado, en la época del Cólera aprendimos a usar sales de rehidratación, la bolsita salvadora, eso funcionó y aprendimos; aun así a la selva le fue peor que a otras regiones. Sin embargo, hay diferencia entre prescribir sales de rehidratación, y prescribir drogas, sobre todo antibióticos y corticosteroides, sin una apropiada monitorización. A los colegas médicos y médicas, les pido pensar en el uso de antibióticos, corticoides, anticoagulantes en el escenario de la Amazonia, donde hay dengue, malaria, parasitosis intestinales y tuberculosis.
Todos los días a las 8pm pienso y aplaudo a nuestras autoridades sanitarias, y por el respeto y cariño que tengo a nuestros líderes también escribo esto, para invitarlos a reflexionar en el mensaje que llega a las comunidades indígenas. Recuerden que la lengua materna en las más de 2.000 comunidades amazónicas no es el castellano, por tanto, allí ya tenemos una dificultad. Pero eso es solo el primer problema. El 70% de las comunidades (Censo 2017) no tiene ni siquiera un puesto de salud, por tanto, el acceso a información y ayuda de salud es sumamente limitada.
¿Qué nos dice la evidencia científica sobre el impacto de enfermedades infecciosas en los pueblos indígenas?
1. Las tasas de mortalidad en brotes de sarampión, malaria e influenza; en promedio fue de 25% con un rango que iba desde menos de 1, hasta 97%. Las tres infecciones tuvieron una tasa de mortalidad similar. Esto de un estudio que resumió datos de 107 brotes ocurridos en 59 sociedades indígenas amazónicas entre los años 1875 y 2008. (1)
2. Los brotes en las comunidades Amazónicas parecen comportarse como en “islas” donde la infección ingresa, se extiende y luego de un tiempo prolongado se podrían volver a presentar (2, 3). Sin embargo, esto depende y cambia con el grado de contacto que tiene cada comunidad, y también depende del número de habitantes en cada comunidad. En la medida que estén muy remotas, la infección se demora en llegar, pero luego se introduce y se disemina rápido. La infección se queda rondando comunidades, no necesariamente los comuneros tienen que volver a salir hacia una zona alta en casos positivos.
Hay diferencia entre prescribir sales de rehidratación, y prescribir drogas, sobre todo antibióticos y corticosteroides.
Aunque no lo explican en estas lecturas, yo me atrevo a postular que la rápida diseminación en estas comunidades se da por las prácticas de cuidado en familias extensas. Por eso es importante mirar los datos separados por etnia y por sexo. Si las mujeres tuviesen un mayor riesgo de infección, aunque no de severidad, sería importante mirar el efecto en temas como la preparación de alimentos y el cuidado de los niños. Además, es importante seguir enfatizando las medidas de distanciamiento físico en las comunidades. Esto nos da tiempo a que las ayudas lleguen, y si alguna de las drogas realmente disminuye la mortalidad por Covid-19, entonces las comunidades indígenas, quizá por primera vez en la historia del Perú, se beneficien en tiempo real de un avance de la ciencia en la salud. Sobre todo, aquellas comunidades donde aún no llega el brote.
Mi trabajo originalmente es sobre la adaptación de los sistemas alimentarios indígenas amazónicos al cambio climático, un tema que hemos puesto a un costado, pero que se nos viene como el tsunami una vez que superemos la pandemia. Por ahora espero que tanto los mensajes desde el Estado, las ONGs, las sociedades científicas, organizaciones indígenas, comunicadores, se reflexionen un poco más, piensen en la oportunidad que tienen de salvar las vidas de peruanos como nosotros, con los mensajes de prevención y con ideas claras sobre el uso de los medicamentos.
________________
1. Walker RS, Sattenspiel L, Hill KRJSr. Mortality from contact-related epidemics among indigenous populations in Greater Amazonia. 2015;5:14032.
2. Cliff AD, Haggett PJH, Place. The epidemiological significance of islands. 1995;1(4):199-209.
3. Black FLJJotb. Measles endemicity in insular populations: critical community size and its evolutionary implication. 1966;11(2):207-11.
Gracias a los profesores Rodrigo Lazo y a Carolina Rodríguez de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), por leer esta versión y por interrogar el tema sobre la salud Indígena y la vulnerabilidad al Covid-19, desde diferentes ángulos, más allá de lo biomédico.
Carol Zavaleta es médica, doctora en geografía de la salud, investigadora de la Universidad Peruana Cayetano Heredia y becaria de la fundación Wellcome Trust del Reino Unido, miembro voluntario de la Brigada de Rescate y Esperanza, miembro de la Red de Aliados de Ucayali.