PROTECCIÓN. Perú asistirá a la Conferencia de las Partes de Biodiversidad, un evento internacional clave para enfrentar el tráfico de especies forestales y de fauna.
Con más de 4.000 alertas de incendios en reportes de alta confianza en lo que va del 2024, cifras crecientes de deforestación y 38 líderes indígenas asesinados en la última década, Perú llegará a la Conferencia de las Partes sobre Biodiversidad (COP16) con un reto mayúsculo: defender la protección y uso sostenible de sus más de 5.000 especies animales y más de 19.000 de flora.
Las mismas son víctimas del tráfico de especies. Tan solo hace tres meses, OjoPúblico reportó sobre el papel de Perú en la ruta del comercio ilegal de las tortugas matamata. En el país, hay 1.167 especies en riesgo, de acuerdo a la Lista Roja de Especies Amenazadas.
Una de las áreas más vulnerables es la Amazonía. Solo dos regiones peruanas de esta —Loreto y Madre de Dios— concentraron el 30% de las intervenciones de fauna silvestre realizadas por el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) en 2023.
Tenemos un gran reto: implementar nuestra Estrategia Nacional que, esperamos, se apruebe este año”, dijo Raquel Soto Torres.
Por eso, Alonso Córdova Arrieta, especialista en Bosques y Asuntos Indígenas de WWF Perú, destaca la función de esta cumbre para hacer frente a delitos ambientales, como el tráfico de especies forestales y de fauna.
“El eslogan ‘Paz con la Naturaleza’ de la COP16 está vinculado a tres elementos: delitos ambientales, que cada vez son mayores, grandes proyectos o megaproyectos, a veces de interés nacional, que van contra derechos de las comunidades o de salvaguardas sociales y ambientales y, por último, la violencia que hay contra los defensores de los derechos humanos o del ambiente”, explicó.
La COP16 se realizará en la ciudad de Cali, Colombia, entre el 21 de octubre y el 1 de noviembre. La cumbre internacional tiene, entre sus principales objetivos, la implementación de las 23 metas acordadas en el Marco mundial Kunming-Montreal (conocido como Marco Global de Biodiversidad) durante la COP15 de 2022.
Aunque existe una gran expectativa porque la cumbre se hará en una nación megadiversa como Colombia, las negociaciones inician con retrasos. Solo 32 de 196 países han presentado sus Estrategias Nacionales y Planes de Acción de Biodiversidad, previo al inicio del evento. Estas constituyen el principal mecanismo de los países para implementar el Marco Global de Biodiversidad.
Perú en la COP16
A la fecha, el Ministerio del Ambiente ha identificado 29 metas nacionales para la protección de la biodiversidad. Pero aún no ha presentado la actualización de su Estrategia Nacional ante la COP, el ente rector del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD, por su sigla en inglés).
“Tenemos un gran reto en los próximos años: implementar nuestra Estrategia Nacional de Diversidad Biológica que, esperamos, se apruebe este año”, dijo Raquel Soto Torres, viceministra de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales, en un evento previo al inicio de la COP16 en el Ministerio del Ambiente.
En la última cumbre de Biodiversidad de 2022, 196 países acordaron presentar sus estrategias y planes nacionales de Biodiversidad antes de la COP16. Perú no es el único país que presentará este documento fuera de fecha: otros 164 tampoco lo han hecho hasta ahora. Esto incluye a Colombia, anfitrión de la COP, y a otras naciones megadiversas de la región, como Brasil, Ecuador y Venezuela.
Un análisis de la plataforma Carbon Brief evidenció que solo cinco de los 17 países que conforman el grupo de los megadiversos habían presentado su actualización a tiempo: Australia, China, Indonesia, Malasia y México.
“Hay mucho que hacer en términos de la construcción de posicionamiento de los países megadiversos, que son quienes deberían poner las reglas, porque son los que tienen más dotación de diversidad biológica, más que los países desarrollados. Pero todavía no estamos en esa posición”, resaltó Gabriel Quijandría Acosta, director regional para Sudamérica de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Estrategia ambiciosa
Perú está trabajando en la elaboración de la Estrategia desde enero. Para incorporar diferentes voces, ha sostenido reuniones con organizaciones civiles, como las de los pueblos indígenas amazónicos. Al respecto, la líder indígena Tabea Casique Coronado señaló que la principal recomendación fue que el documento reconozca de manera explícita el aporte de los pueblos indígenas en la conservación.
“Hemos propuesto contar con indicadores medibles, como el reconocimiento y titulación de los pueblos indígenas del territorio. Estamos esperando que el Ministerio del Ambiente, a través de la Dirección de Diversidad Biológica, haya acogido nuestros comentarios. Muchas veces se plantea y, luego de un proceso de evaluación en varias direcciones, no se evidencia nuestro aporte”, subrayó.
Mientras los pueblos indígenas estamos luchando y protegiendo la Amazonía, hay una corriente que va en contra", dijo Tabea Casique.
En esa línea, Musye Lucen Espinoza, coordinadora de la Red Peruana de Juventudes y Biodiversidad (GYBN Perú), señaló que han contado con el apoyo del Ministerio del Ambiente y de organizaciones ambientales como The Nature Conservancy y WCS para recoger las voces de 385 jóvenes de diferentes puntos del país sobre cuáles son las metas prioritarias para ellos.
Los resultados fueron presentados el 16 de octubre en el Ministerio del Ambiente y destacan a las metas 1, 2, 7, y 8 del Marco Global de Biodiversidad. Las mismas abordan la planificación y la gestión de todas las zonas para reducir la pérdida de biodiversidad, la restauración del 30% de todos los ecosistemas degradados, la reducción de la contaminación y del impacto de la crisis climática en la biodiversidad.
“Estamos difundiendo estos resultados con miras a que puedan ser implementados en la Estrategia Nacional de Diversidad Biológica y su futuro Plan de Acción. Nosotros, como GYBN Perú, no hemos participado en la totalidad de la elaboración de la estrategia, sino dando nuestra opinión en la consulta pública que cerró a inicios de octubre”, contó Musye Lucen Espinoza.
Metas en papel
Desde el inicio del Gobierno de Dina Boluarte, en diciembre de 2022, se han aprobado leyes que, en lugar de proteger la Amazonía, ponen en riesgo este bioma que, a nivel regional, alberga al 25% de la biodiversidad terrestre.
Tal es el caso de la Ley 31973, que modifica la Ley Forestal y de Fauna Silvestre y facilita el otorgamiento de títulos habilitantes con fines agropecuarios. Esta ley fue promulgada de forma irregular, no fue observada por el Ejecutivo y, además, comunidades indígenas y organismos de la sociedad civil y académica han pedido su derogación.
“Mientras los pueblos indígenas estamos luchando y protegiendo la Amazonía, hay una corriente que va en contra. La ‘Ley Antiforestal’ debió haber tenido observaciones desde los ministerios. Ellos, en su momento, no dijeron nada. No hubo oposición ni alguna recomendación. Entonces, también son cómplices de esa ley”, dijo Tabea Casique Coronado, responsable de cambio climático de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep).
Por eso, Gabriel Quijandría Acosta, especialista en gestión ambiental y de recursos naturales, precisó que, en Perú y en América Latina, existe una falta de conexión entre los procesos de negociación y su aceptación en el ámbito nacional nacional.
“Cuando las delegaciones regresan a sus países diciendo ‘hemos acordado esto, y el país está obligado a hacer estas cosas’, los ministerios se sorprenden y dicen ‘Ustedes están en contra del desarrollo. ¿Por qué se aceptó esto?’. Hay una desconexión ahí. Lo hablo por experiencia propia”, contó el exviceministro de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales en los gobiernos de Ollanta Humala y Martín Vizcarra, y exministro del Ambiente en el gobierno de Francisco Sagasti.
Más de 14.000 personas en Cali
La presidencia de la COP16, liderada por la ministra de Ambiente de Colombia, Susana Muhamad, ha anunciado que está cumbre será la más grande en la historia, con más de 14.500 asistentes.
“Esta es la primera vez que una cumbre sobre biodiversidad tendrá tanta representación de los países. A la fecha, nos han confirmado 10 jefes de Estado, 103 ministros de Ambiente y 196 delegaciones de Naciones Unidas”, dijo en setiembre pasado.
Hay mucho que hacer en términos de la construcción de posicionamiento de los países megadiversos", resaltó Gabriel Quijandría Acosta.
Además, esta será la primera cumbre de biodiversidad que contará con una Zona Verde, un espacio común en las cumbres sobre Cambio Climático, que está destinado a la participación de los ciudadanos, organizaciones no gubernamentales y el sector privado.
Dicha zona es complementaria a la Zona Azul, donde se llevan a cabo las negociaciones que desembocan en un documento final con los acuerdos adoptados de forma unánime por las 196 partes (195 países y la Unión Europea).
Musye Lucen Espinoza, representante de los jóvenes de Perú, indicó que, al realizarse en Colombia, se prevé que la delegación peruana sea grande. “No conocemos la cifra oficial de la delegación. Pero, cuando nos inscribimos, notamos que estaban yendo casi 250 personas. Es un número bastante considerable. No sabemos si, al final, todas van a ir porque varias acreditaciones todavía están en proceso”, precisó.
OjoPúblico solicitó una entrevista con el director de la Dirección de Diversidad Biológica, Mirbel Epiquién Rivera, para conocer sobre la participación del Gobierno peruano en la pŕoxima COP16. Sin embargo, hasta el cierre de este artículo, no hubo respuesta.
NEGOCIACIONES. La cumbre de Biodiversidad se llevará a cabo del 21 de octubre al 1 de noviembre en Cali, Colombia.
Foto: UN Biodiversity
Financiamiento en la agenda COP16
Además de la actualización de las Estrategias y Planes Nacionales de Biodiversidad, el financiamiento será uno de los temas clave en el evento internacional. Eso porque, para implementar todo lo acordado en el Marco Global de Biodiversidad, se necesitará dinero.
Gabriel Quijandría Acosta detalló que hay dos metas del Marco Global que se refieren a los temas de financiamiento: la 18 y la 19. La primera de ellas aborda la necesidad de aumentar los recursos financieros para invertir en temas de diversidad biológica. La segunda se vincula a la reducción de los flujos de financiamiento que tienen un efecto negativo sobre la naturaleza.
Al respecto, Tabea Casique Coronado precisó que el tema es central, también, para las comunidades indígenas, pues piden mecanismos que aseguren el acceso directo a los fondos. Esto, explicó el especialista Alonso Córdova, permitirá que los pueblos aseguren sus tierras y desarrollen seguridad y gobernanza territorial.