El martes 8 de noviembre, las asociaciones shipibas Acushikolm y Ashirelv de Cantagallo firmaron un acta de acuerdo con representantes de la Municipalidad de Lima, donde el municipio propone trasladar a la comunidad Shipibo-Konibo a un terreno en Martinete, ubicado en el Cercado de Lima.
El documento solo lleva la firma de dos dirigentes shipibos: Karina Pacaya (Ashirelv) y Wilson Valles (Acushikolm). No aparece la rúbrica de ningún representante de la otra organización Avshil, dirigido por Ricardo Franco.
“Los representantes de la Municipalidad de Lima presentan como una alternativa para la vivienda el terreno de Martinete, ubicado en la cuadra 7 del Jirón Amazonas en el Cercado de Lima, propuesta que es recibida con satisfacción por los dirigentes de la Comunidad Shipibo-Konibo, debiendo llevarla a consulta a sus representados”, señala el documento que también es firmado por Francisco Gavidia, Gerente de Participación Vecinal de la Municipalidad de Lima y Mario Casaretto, subgerente de Defensa Civil.
El documento da cuenta de que los dirigentes de la comunidad buscan una solución distinta a la del terreno de Campoy, ubicado en San Juan de Lurigancho, debido al “reducido tamaño y la lejanía del mismo”.
El acta de acuerdo también da cuenta de que la Municipalidad Metropolitana de Lima ha conformado “un equipo de trabajo con los gerentes involucrados en la problemática”.
MARTINETE ES UN PELIGRO
El terreno donde la Municipalidad de Lima quiere reubicar a la comunidad shipibo-konibo se ha inundado en dos oportunidades, asegura María Foronda, congresista y presidenta de la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos, Ambiente y Ecología.
CONFERENCIA. Los congresistas participaron en una conferencia de prensa junto a los líderes dirigenciales de la comunidad Shipiba de Cantagallo
“¿Por qué quieren colocar (a la comunidad Shipiba) en Martinete que ha sido dos veces inundada y que también ha sido un relleno de desmonte?”, cuestiona la integrante de la bancada del Frente Amplio, que asistió esta mañana al Colegio Bilingüe Intercultural de Cantagallo, junto a una comitiva parlamentaria para atender los problemas de la comunidad shipibo-konibo afectadas por el incendio del último 4 de noviembre.
COMISIÓN EVALUARÁ DESTINO DE LA COMUNIDAD
Desde el próximo lunes funcionará una mesa de trabajo multisectorial técnica, liderada por el Ministerio de Vivienda, que tendrá la responsabilidad de resolver el Caso Cantagallo, explicó Foronda en conferencia de prensa realizada hoy.
La mesa de trabajo también estará integrada por miembros de los ministerios de Inclusión y Desarrollo Social, de Educación, de Salud y de Transportes y Comunicaciones, junto a representantes de Indeci, la Municipalidad del Rímac y la comunidad afectada.
VÍCTIMAS. Según el informe de INDECI, fueron 1564 las personas damnificadas por el incendio y hubieron 7 heridos.
“(Luis Castañeda) demuestra una posición totalmente reprochable de un alcalde que debe liderar la solución”, acusó Foronda Farro tras asegurar que el alcalde de Lima ha rechazado las dos invitaciones de su comisión.
“Queremos que las autoridades nos respalden y garanticen nuestra posición. Si hay una propuesta viable de la Municipalidad, estamos para dialogar y llegar a un acuerdo con una solución definitiva. Llevamos luchando años por este espacio y pedimos a las autoridades nuestra garantía”, reclamó Pacaya, representante de Ashirelv durante la conferencia de prensa.
El grupo multisectorial definirá la ubicación de la comunidad, el empadronamiento de los integrantes shipibo-konibo y establecerá una política de prevención de riesgo para la comunidad, explicó Gloria Montenegro, congresista y presidenta de la Comisión de Inclusión Social y Personas con Discapacidad.