Las historias que otros no te quieren contar
Países de la Unión Europea (UE) y de América Latina (CELAC) se reunieron en Bruselas para consolidar lazos políticos, comerciales y medioambientales y con el objetivo de fortalecer la defensa de la democracia. En el caso de Perú solo asistió la canciller Ana Gervasi en lugar de Boluarte.
La tercera Cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) fue inaugurada oficialmente en Bruselas (Bélgica) este lunes. Al menos 19 jefes de Estado participan del evento, que busca afianzar los lazos birregionales, con miras de un mejor diálogo en temas políticos, comerciales, medioambientales y de defensa de la democracia.
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, no acude a la histórica cumbre, que tiene lugar después de 8 años. En su representación asiste a la cita la canciller Ana Gervasi, quien sostendrá reuniones bilaterales con líderes de la región europea y socios. A su llegada, evitó responder sobre los motivos de la ausencia de Boluarte.
#CumbreCelacUE
— OjoPúblico (@Ojo_Publico) July 17, 2023
Hoy inició la Cumbre de la Unión Europea y Latinoamérica en #Bruselas con ausencia de la presidenta 🇵🇪 Dina Boluarte.
Nuestra colega @DelLoyola está allá y nos reportará los alcances del encuentro que abordará temas comerciales, políticos y ambientales. 🧵 pic.twitter.com/NEBqOo88IK
Cabe recordar que se han anunciado movilizaciones de protestas en el Perú contra el gobierno de Boluarte para este miércoles 19 de julio.
Los líderes sudamericanos que sí asisten a la cita internacional son los presidentes de Argentina, Alberto Fernández; de Brasil, Luiz Ignacio Lula da Silva; de Bolivia, Luis Arce; de Colombia, Gustavo Petro; de Chile, Gabriel Boric; de Ecuador, Guillermo Lasso; de Uruguay, Luis Lacalle Pou; y de Paraguay, Mario Abdo Benítez.
La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, asiste en representación del presidente Nicolás Maduro.
Durante las primeras horas de este primer día de la reunión, el presidente de Brasil, Lula da Silva, junto con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, sostuvieron un encuentro con la participación de autoridades europeas, entre ellas, Ursula von Der Leyen, presidenta de la Comisión Europea (CE).
Además, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, firmó un memorándum de entendimiento con la UE sobre cooperación en materia energética, que responde a los objetivos de lucha contra el cambio climático.
Durante el arribo oficial de los líderes políticos, algunos presidentes sudamericanos ofrecieron declaraciones sobre sus expectativas para este trascendental encuentro de países birregionales, que continuará este 18 de julio. Principalmente, coincidieron en la necesidad de convocar con más frecuencia estas cumbres para mantener el diálogo tan necesario entre naciones, que permite no perder los lazos comerciales y lograr una sociedad más pacífica.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, manifestó su intención de “impulsar un mayor nivel de acuerdo, no solo comercial y económico, sino también político y social”. El mandatario chileno enfatizó que buscará fortalecer relaciones con países con los que comparta valores como la democracia y el respeto a los derechos humanos.
Por la representación de Venezuela, la vicepresidenta Delsy Rodríguez aseguró que aspiran “a caminos de paz para todos los países del mundo”. No obstante, reclamó el “levantamiento del bloqueo criminal contra Venezuela” y dejó un mensaje de cuestionamiento a los países europeos por los avances del cambio climático.
“Es penoso ver cómo la gobernanza occidental gasta más de 30 veces en guerras, en instancias militares, de lo que se hace para mitigar la crisis climática”, sostuvo Delsy Rodríguez.
Tras recibir la bienvenida oficial, los líderes políticos de la Unión Europea, Latinoamérica y el Caribe se congregaron en un solo espacio para participar de la sesión de apertura. El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, dio el discurso de inauguración, dejando un mensaje esperanzador para los países.
No obstante, fue enfático al cuestionar la guerra entre Rusia y Ucrania. “La mayoría de países han votado en muchas resoluciones para condenar esta guerra. Todo país de este planeta debe permanecer seguro y es por eso que Rusia no puede tener éxito”, aseveró.
Por su lado, el presidente Lula da Silva, si bien pidió un “alto al fuego”, consideró que deberían levantarse las sanciones a Rusia. “Utilizar las sanciones y bloqueos es algo que solo sirve para penalizar a las partes más vulnerables de la población, necesitamos paz”, acotó.
Finalmente, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, quien asumirá la presidencia pro temporera de la CELAC en el 2024, también pidió el fin de los conflictos, aunque agregó: “se envían trillones de dólares en armamento para la guerra, pero no somos capaces de construir el desarrollo integral de la humanidad con los Objetivos del Desarrollo Sostenible propuestos por Naciones Unidas para 2030”.
El actual presidente de CELAC, primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, consideró que la cumbre no debería ser el centro de debate para discursos sobre la guerra. No obstante, trascendió que los países trabajan en llegar a un acuerdo sobre este punto con el objetivo de incluirlo en el acuerdo final.
Durante el primer día de la cumbre, la canciller de Perú, Ana Gervasi, mantuvo una actitud bastante reservada sobre sus actividades y reuniones bilaterales. A través de sus redes sociales, la Cancillería informó sobre reuniones con su homólogo de Chile, Alberto van Klaveren; con el de Portugal, João Gomes Cravinho; y su participación en la primera reunión del Grupo de Contacto del Consenso de Brasilia.
En este último encuentro, se reunió con sus pares de Brasil, Bolivia y Paraguay, y se debatió sobre la integración regional.
Además, OjoPúblico pudo conocer que, durante la reunión con el canciller chileno, se dialogó sobre la presidencia de la Alianza del Pacífico, que inicialmente debía ser asumida por el Perú. Debido a los desacuerdos con México (país miembro), por la crisis política en Perú, la presidencia fue entregada temporalmente a Chile por un mes. En unas semanas, el plazo quedará cumplido. En ese sentido, se preveen tener las acciones preparadas para ese momento.
Las reuniones bilaterales de los presidentes continuarán este 18 de julio. Hasta el momento, se conoce que se han programado firmas de acuerdos de entendimiento entre la Unión Europea, Uruguay y Chile.
Líderes de la UE y la CELAC se reúnen en Bruselas después de ocho años. Foto: Unión Europea.
Desde las 9 de la mañana de hoy martes las principales autoridades de la UE y la CELAC fueron llegando a la sede del Consejo Europeo en Bruselas para reuniones bilaterales en el marco de esta tercera cumbre.
La actividad principal fue la sesión plenaria que reunió a todos los líderes asistentes. En ella, se debatieron los principales puntos de la agenda. Sin embargo, el acuerdo final todavía se ha visto estancado por las discrepancias sobre la guerra en Ucrania.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, fue uno de los líderes más enfáticos en pronunciarse y exhortó al respeto del derecho internacional. “Lo que sucede en Ucrania es una guerra de agresión imperial inaceptable, en donde se viola el derecho internacional y entiendo que la declaración conjunta está trabada porque algunos no quieren decir que es ‘la guerra contra Ucrania’”, expresó.
En tanto, en declaraciones a OjoPúblico, el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Alberto Van Klaveren confirmó el diálogo sostenido ayer, en el primer día de la cumbre, con la canciller peruana, Ana Gervasi, en el que abordaron las características del traspaso de la presidencia de la Alianza del Pacífico al Perú.
📌 En el segundo día de la #CumbreCelacUE, los jefes de Estado y representantes aún no se ponen de acuerdo sobre el acuerdo final.
— OjoPúblico (@Ojo_Publico) July 18, 2023
El tema de quiebre ha sido Ucrania. La Unión Europea busca que la declaración final incluya una parte que condene la guerra de Rusia contra Ucrania. pic.twitter.com/ay7KZ5qCAg
“Los cuatro países [Colombia, Chile, México y Perú] están de acuerdo. La presidencia pro tempore chilena es simplemente temporal y básicamente para facilitar la solución del problema que había bloqueado la Alianza del Pacífico”, aseveró Van Klaveren para OjoPúblico.
En el transcurso de la mañana de hoy, la ministra peruana Ana Gervasi se reunió con la delegación de República Checa. Y como última actividad del día lunes, sostuvo un encuentro con el primer ministro de Haití, Ariel Henry.
El canciller de Chile, Alberto Van Klaveren, se pronunció este martes, desde Bruselas, sobre la situación política que atraviesa el Perú bajo la presidencia de Dina Boluarte.
“Somos respetuosos de la institucionalidad peruana. El Perú es un país hermano y tenemos relaciones absolutamente normales con el país”, afirmó para OjoPúblico.
Estas declaraciones se dan meses después de que en la última cumbre de la CELAC, realizada en Buenos Aires [enero de 2023], el presidente de Chile, Gabriel Boric, pidiera no ser indiferente frente al contexto que atravesaba el Perú por las protestas. “Personas que salen a marchar para reclamar lo que consideran justo terminan baleadas por quien debiera defenderlas”, dijo en aquella oportunidad.
Tras esta contundente afirmación, la respuesta de la presidenta de Perú, Dina Boluarte, no se hizo esperar. “¿Qué salida están planteando frente a la crisis en el Perú? ¿La salida de la violencia o la salida de la paz y la democracia?”, dijo. Eso tensó las relaciones entre ambos países.
Esta vez, durante su participación en la actual cumbre UE-CELAC en Bruselas, Boric ha insistido en un discurso de “respeto irrestricto a los derechos humanos, como base civilizatoria, independiente del color del gobierno que esté en el poder” para sostener las relaciones con países de la región.
"No todo el mundo ha salido contento de todos los acuerdos", afirmó el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, a la salida de la reunión final de los líderes asistentes a la Tercera Cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), para lograr los acuerdos y plasmarlos en el texto final de la cita en Bruselas.
"Pero lo hemos conseguido" —afirmó Ralph Gonsalves— y prosiguió a enumerar los puntos acordados en la al parecer tensa reunión en el segundo y último día de la cumbre birregional. "Hemos conseguido hablar del cambio climático, apoyo al desarrollo sostenible, cuestiones como [la guerra en] Ucrania, el embargo contra Cuba, la participación del sector privado en el desarrollo de CELAC-UE, la cuestión de los derechos humanos, la defensa del derecho internacional y los principios de la carta de Naciones Unidas", señaló.
A grandes rasgos —según funcionarios presentes en la reunión de líderes— también se han tocado temas como la deforestación, el Pacto Verde y las cadenas de suministros, y que todo se verá reflejado en el documento final que se está elaborando.
Por su parte, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, informó que han expresado preocupaciones puntuales. “Un acuerdo necesita que todos ganen, queremos preservar un acuerdo donde todos estemos satisfechos”.
Ursula Von der Leyen, presidenta de las UE, informó que esperan concluir las negociaciones con el Mercosur a más tardar en diciembre próximo, con lo que dejaba claro que no se llegó a un acuerdo con el bloque económico fundado en 1991 por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Tras dos días de reuniones bilaterales, sesiones plenarias, intercambios de ideas y firmas de memorándums, finalmente los países de la Unión Europea y la CELAC suscribieron un acuerdo final, que por muy general no dejó satisfechos a los asistentes.
En el documento publicado por la Comisión Europea se incluyeron puntos más generales sobre la agenda que se debatió este 17 y 18 de julio: cambio climático, paz y estabilidad mundial y relaciones comerciales.
Uno de los temas que resalta entre los primeros puntos menciona el compromiso por reforzar el diálogo y fomentar “amplios contactos interpersonales”. Esto en referencia —como lo había adelantado OjoPúblico— a la intención de seguir sosteniendo reuniones frecuentes, a diferencia de esta vez en la que la cumbre tuvo lugar después de 8 años.
También se pronunciaron sobre el respeto a la democracia, los derechos humanos y al derecho internacional, “incluidos los principios de soberanía, autodeterminación, no intervención en asuntos que son esencialmente de la jurisdicción interna de los Estados y abstenerse en sus relaciones internacionales de la amenaza o el uso de la fuerza contra la integridad territorial".
Sobre Ucrania, uno de los puntos que generó más discrepancia entre los líderes, finalmente se aprobó: “respaldamos todos los esfuerzos diplomáticos que busquen lograr una paz justa y sostenible en consonancia con la Carta de las Naciones Unidas”.
El acuerdo señala que todos los países refrendaron el acuerdo “con una única excepción por estar en desacuerdo con uno de los apartados”, en referencia a Nicaragua. En la declaración no se hace mención a Rusia.
Otro de los puntos a destacar se refiere a la crisis climática. En el apartado 23 se indica que se dispondrán USD 100.000 millones al año “para financiar la lucha contra el cambio climático en apoyo de los países en desarrollo, y de duplicar la financiación para la adaptación al cambio climático de aquí a 2025”.
“Tenemos a los 27 países de la UE, que expresan que quieren hacer algo sobre este tema. Esta es una declaración importante, tenemos que trabajar para materializarla”, dijo Ralph Gonsalves, presidente de la CELAC y primer ministro de San Vicente y Las Granadinas.
Además, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, señaló que han expresado sus inquietudes sobre algunas políticas impulsadas por la UE.
“Creo que estamos en una buena senda y en una senda positiva por el acuerdo, pero un acuerdo necesita que todos ganen, porque si gana uno y el otro pierde, eso es una burla, no es un acuerdo, y lo que queremos preservar es un acuerdo en donde todos estemos satisfechos”, expresó el mandatario argentino.
Como se recuerda, hace unos meses el Parlamento Europeo aprobó una norma para prohibir productos importados de Latinoamérica que provengan de la deforestación.
El acuerdo hace una referencia general a ello al señalar que explorarán “la necesidad de utilizar criterios más allá del PIB, como la vulnerabilidad climática, para determinar la elegibilidad de los países, para acceder a financiación concesional, y trataremos de proporcionar un estímulo financiero, para que ningún país tenga que elegir entre luchar contra la pobreza y proteger el planeta”.
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