MEDIDAS. La autora propuso alternativas para mitigar los efectos de la pandemia en la labor de las mujeres.
La llegada del Covid-19 ha tenido efectos adversos en distintas dimensiones de la vida de niños, jóvenes, adultos y adultos mayores. Evidencia de distintos países resalta que la situación laboral de las mujeres se ha visto, particularmente, afectada. Un reporte del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) indica que la Covid-19 ensanchará la brecha de pobreza monetaria entre hombres y mujeres; especialmente en los jóvenes que tienen entre 25 y 34 años.
En el 2021, por cada 100 millones de hombres jóvenes que viven en situación de pobreza habrá 118 millones de mujeres viviendo en la misma situación. Y se espera que esta brecha aumente si no se toman medidas al respecto.
Haciendo uso de varias investigaciones, hoy hablaremos de los efectos de la pandemia en el trabajo de las mujeres; así como las consideraciones que se deben tomar a futuro.
Empecemos por los efectos. Makovi y sus coautores analizaron la situación laboral de hombres y mujeres en Alemania, Estados Unidos y Singapur desde el inicio de la pandemia. En estos países se estima que, en promedio, las mujeres tienen una mayor probabilidad de haber reducido sus horas de trabajo en comparación a los hombres. Asimismo, las mujeres tienen una probabilidad de desempleo tres puntos porcentuales mayor a la de los hombres.
En Inglaterra la probabilidad de desempleo es 7 puntos porcentuales mayor entre las mujeres con respecto a los hombres".
En Inglaterra, haciendo uso de información que fue recolectada durante los meses de la pandemia, Adams y sus coautores encuentran una situación similar. La probabilidad de desempleo es 7 puntos porcentuales mayor entre las mujeres con respecto a los hombres.
Al analizar las horas de trabajo, Andrew y sus coautores encuentran que la cantidad de horas de trabajo disminuyó en mayor proporción entre las madres de familia. Entre las razones de esto los autores encuentran que las mujeres tienen una mayor probabilidad de dejar de trabajar para dedicarse a las labores del hogar y al cuidado de los hijos.
Ahora veamos qué está pasando en países de bajos y medianos ingresos, como el nuestro. En nuestro país, un estudio realizado por Miguel Jaramillo y Hugo Ñopo analiza la situación de la población económicamente activa, que ha perdido la posibilidad de trabajar, en el corto y mediano plazo, debido a las restricciones impuestas por la pandemia.
Los autores encuentran que existirá una brecha de género en los ingresos salariales".
Usando data del 2018, los autores encuentran que existe mayor presencia femenina en sectores y categorías de trabajo que han sufrido mayores limitaciones, debido a la pandemia. Entre estas categorías de trabajo se encuentran aquellos que trabajan a tiempo parcial, trabajadores independientes, empleadores de microempresa, así como trabajadores informales con contratos de plazo fijo.
Al analizar esta data, tomando en cuenta la situación de pobreza, los autores encuentran que existirá una brecha de género en los ingresos salariales. En el corto plazo, las mujeres estarán en capacidad de generar el 43% de sus ingresos laborales; mientras que los hombres podrán generar el 49%. Esta brecha de género en ingresos salariales será aún mayor cuando se analice la situación en zonas rurales.
Respecto a la población más joven, Santiago Cueto y sus coautores analizaron data que fue recolectada en Perú, vía telefónica en el 2020. La data refleja que el empleo de los jóvenes de 26 años se redujo de 81% a 39% durante la primera cuarentena. A octubre del 2020 también se observa que los niveles de desempleo no habían alcanzado la situación prepandemia y que las mujeres se encontraban entre los grupos más vulnerables con respecto a los hombres.
Se debe generar programas de capacitación para el desarrollo de habilidades de las mujeres".
¿Qué se puede hacer al respecto? Destacaré 3 medidas discutidas en los estudios mencionados. Primero: generar programas de capacitación para el desarrollo de habilidades que son demandadas en sectores menos afectados por la Covid-19. Asimismo, se debe considerar capacitaciones en tecnologías de la información y evaluar cuál es la brecha digital en el acceso femenino a dispositivos electrónicos.
Segundo: tomando en cuenta que el cuidado de los niños recae, principalmente, en las mujeres, se debe evaluar el diseño de programas de cuidado infantil para apoyar la continuidad y reinserción laboral de las mujeres.
Finalmente, se debe remover algunas barreras que puedan estar afectando la inclusión económica de las mujeres empresarias, durante la pandemia y los meses de recuperación. Por ejemplo, a través de líneas de crédito u otros mecanismos financieros.
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Referencias:
1. The impact of COVID-19 on gender inequality in the labor market and gender-role attitudes
Autores: Malte Reichelt, Kinga Makovi y Anahit Sargsyan.
Setiembre 22, 2021
European Societies
2. Inequality in the Impact of the Coronavirus Shock: Evidence from Real Time Surveys
Autores: Noam Angrist, Peter Bergman, Caton Brewster y Moitshepi Matsheng.
Abril, 2020
IZA DP
3. The Gendered Division of Paid and Domestic Work under Lockdown
Autores: Alison Andrew, Sarah Cattan, Monica Costa Dias, Christine Farquharson, Lucy Kraftman, Sonya Krutikova, Angus Phimister y Almudena Sevilla.
Julio, 2020
IZA DP
4. Impactos de la epidemia del coronavirus en el trabajo de las mujeres en el Perú
Autores: Miguel Jaramillo y Hugo Ñopo.
Junio, 2020
Grupo de Análisis para el Desarrollo (GRADE)
Autores: Santiago Cueto, Kath Ford, Alula Pankhurst, Renu Singh y Nguyen Thang.
Enero, 2021
Young Lives