DETALLES. Mapa de la comunidad maijuna de Sucusari, cada espacio tiene nombre propio.
El pueblo indígena maijuna —que habitan las cuencas de los ríos Napo y Putumayo, en Loreto— plasman la riqueza de su cultura y la biodiversidad de su territorio en mapas que ellos mismos han dibujado sobre enormes papeles que parecen grandes sábanas extendidas. Sobresalen la variedad de fauna y los tipos de árboles y plantas. Se aprecian aguajales, cochas, collpas y quebradas, cada uno con nombre propio.
Ttambién la espiritualidad está en los mapas. En un punto, cerca del río Algodón, que se conecta con el Putumayo, en la frontera con Colombia, identifican un lugar donde, de acuerdo a sus creencias, se convierten en tigres.
Sin embargo, un proyecto carretero de casi 188 kilómetros, que promueve el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), amenaza su territorio y el de otros pueblos originarios, al igual que las Áreas de Conservación Regional (ACR) Maijuna Kichwa y Ampiyacu Apayacu. Así lo advierten organizaciones indígenas del Putumayo, Napo y el Bajo Amazonas.
El pueblo maijuna, antes llamado orejón —porque los antiguos se lucían con discos hechos de madera de balsa en los lóbulos de sus orejas—, lo componen las comunidades de Sucusari (río Napo), Nueva Vida y Puerto Huamán (río Yanayacu), y San Pablo de Totolla (río Putumayo). Sus miembros también se encuentran en algunos pueblos mestizos y capitales de distrito.
TRAZO A MANO. Mujeres del pueblo maijuna representan sobre el papel su territorio ancestral.
Foto: Nathaly Chumbe / OnePlanet
El pueblo maijuna suma alrededor de 600 habitantes, según la organización One Planet, que precisa, además, que se trata de uno de los pueblos más pequeños y vulnerables de la Amazonía. De acuerdo al Ministerio de Cultura, su idioma, el maijɨki, se considera en peligro de extinción.
Los mapas del pueblo maijuna son también una narración gráfica de su historia reciente frente a las actividades ilegales. En un sector, entre el río Yanayacu y el río Algodón, las comunidades Nueva Vida y Puerto Huamán identificaron una “ruta de la droga”.
Los mapas son también una narración gráfica de su historia reciente frente a las actividades ilegales".
Rusber Tangoa Ríos, presidente de la Federación de Comunidades Nativas Maijunas (Feconamai), señaló a OjoPúblico que dicha ruta funcionó en los últimos años de los noventa y que desde entonces no se ha vuelto a activar. La creación del Área de Conservación Regional Maijuna Kichwa, en 2015, contribuyó a que esto no ocurra, sostiene.
En la quebrada de Algodoncillo, que avanza en paralelo al río Algodón, los comuneros identifican un sitio donde perdieron la vida cinco personas por motivo de la droga. Un trazo señala la ruta para llevar la sustancia ilegal y que abarca el río y el bosque.
HISTORIA. Mapa muestra lugares de valor espiritual para los maijuna, donde, según sus creencias, se pueden convertir en otros seres.
Fuente: Comunidades Nueva Vida y Puerto Huamán
A lo largo de su historia, los maijuna han vivido episodios trágicos, como la época del caucho, entre finales del siglo XIX y las primeras décadas del siglo XX que, de acuerdo a la antropóloga francesa Irène Bellier, redujo a la décima parte su población original.
Irène Bellier es autora del libro El temblor y la luna: ensayo sobre las relaciones entre las mujeres y los hombres mai huna. Ella desembarcó en territorio maijuna por primera vez en el año 1979 y desde entonces visita de manera regular la zona amazónica. Antes, los maijuna vivían monte adentro, fuera del área de creciente de los ríos, explica la científica social.
“Ahora sus casas son elevadas y a veces las chacras se inundan y pierden sus cosechas. El cambio climático afecta tanto sus prácticas culturales como sus cultivos”, alerta la investigadora a OjoPúblico sobre las nuevas amenazas al territorio ancestral de este pueblo.
En el pasado, los maijuna también fueron empleados en la explotación de marfil vegetal y madera de rosa, así como en la caza de animales cuyas pieles tenían valor comercial.
SABIO MAIJUNA. De gorra gris, Liberato Mussolini, de la comunidad Nueva Vida. Fue un entusiasta promotor de su cultura.
Foto: Ricardo Iberico / One Planet
Con el tiempo, los espacios colectivos que eran las malocas desaparecieron y quedaron solo las viviendas unifamiliares. En el documental Guardianes del Bosque, comuneros maijunas recuerdan las invasiones de madereros.
Los mapas maijunas se elaboraron con el aporte de hombres y mujeres de todas las edades, entre ellos los ancianos, incluidos sabios y sabias de las comunidades, que tienen un conocimiento más profundo del territorio “y que hoy son pocos”, dice el presidente de la Feconamai, Rusber Tangoa Ríos.
A lo largo de su historia, los maijuna han vivido episodios trágicos, como la época del caucho".
En la cosmovisión maijuna su héroe creador es Maineno, que representa a la luna. En los talleres, los sabios cuentan cómo este convirtió a las personas en animales y cómo creó las cochas bravas. Liberato Mussolini Mujica, fue un sabio de la comunidad de Nueva Vida, quien conversaba con los jóvenes y los visitantes sobre aquel dios y su pueblo.
“Él [Liberato] era bien dinámico, recopilaba cuentos, historias y cantos maijuna; visitaba colegios y hablaba con los estudiantes”, recuerda Rusber Tangoa Ríos. Liberato falleció en junio de este año y con él se extingue un fragmento de la memoria de un pueblo.
SAN PABLO DE TOTOLLA. La comunidad, en la cuenca del río Putumayo, acoge un sinfín de quebradas. Mapa expone su diversidad de fauna.
Fuente: Comunidad San Pablo de Totolla.
Los mapas se elaboraron en las comunidades y se plasmaron primero sobre amplios pliegos de papel. Con lápices de colores y recostados o sentados, mujeres, niños, hombres y mayores trazaron cada sector.
Luego, los mapas, cada trazo y cada elemento, fue validado con las mismas comunidades con el fin de ser reproducidos en lienzos pintados con acrílico. Por el nivel de detalle, son una prueba de que los maijuna mantienen, pese a los procesos históricos vividos, un conocimiento fresco de su territorio.
En estos también se aprecia la riqueza de los ríos en variedades de especies, historia y espiritualidad. Sobre los ríos Napo y Putumayo los maijuna sitúan bufeos rosados y manatíes. En otros puntos, se representan sirenas, de cuyos cantos, según Rusber Tangoa Ríos, dan fe los más antiguos.
Sobre los ríos Napo y Putumayo los maijuna sitúan bufeos rosados y manatíes".
Un precedente en la elaboración de mapas culturales lo tuvieron los indígenas del pueblo kukama-kukamiria, que en 2020 pusieron en línea la plataforma Parana Marañún tsawa: El alma del Río Marañón, que rescata y organiza las historias, el vínculo y la cosmovisión de este otro pueblo amazónico con los seres del río.
Aquel proceso contó con la planificación y organización de Radio Ucamara, con sede en Nauta.
Este mismo medio facilitó, en 2023, el proceso creativo de los maijuna, el cual ha culminado con la elaboración de tres mapas culturales y que, desde este mes, serán parte de una plataforma interactiva, donde además se expondrán videos hechos por las propias comunidades.
MAPAS. En los talleres de reconocimiento del territorio, participaron personas de todas las edades, especialmente jóvenes.
Fuente: Nathaly Chumbe / One Planet
Los ancianos son los principales hablantes del idioma maijɨki, y la falta de espacios donde compartir su lengua y cultura con los más jóvenes, hace que estas se vayan diluyendo, según se ha identificado en los talleres de elaboración de los mapas.
La carretera
El proyecto de una carretera que promueve el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), es una amenaza para el pueblo maijuna, así lo han declarado sus líderes en una visita a Lima, en agosto.
La vía, de 188 kilómetros, consta de cuatro tramos. Hasta el momento se ha construido solo el primer tramo del proyecto, que abarca el puente del río Nanay, el cual por ahora no conduce a ninguna parte y ha facilitado el ingreso de invasores a las comunidades indígenas cercanas.
Así lo sostiene Zoila Ochoa Garay, líder de la comunidad murui Centro Arenal, ubicada a unos 30 minutos en moto de la comunidad kukama-kukamiria de Santo Tomás, donde finaliza el citado primer tramo.
TERRITORIO. Bosques en territorio maijuna. La construcción de una carretera que lo atraviese es un peligro, señalan líderes maijuna.
Fuente: Brian Griffiths / One Planet
El cuarto tramo de la carretera que impulsa el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, es el más largo con 147,5 kilómetros, atraviesa territorio del pueblo maijuna y la propuesta de Área de Conservación Regional Medio Putumayo Algodón.
La Federación de Comunidades Indígenas del Bajo Putumayo (Fecoibap) y expertos, advierten que la vía, que conectará Iquitos con la frontera con Colombia, facilitará la expansión de las economías ilegales. “Hablamos de que la carretera convertirá a Loreto en una narcoregión, si es que no lo es ya”, alerta Julio Trino Blanco, presidente de One Planet.
En Loreto, los cultivos de coca se han incrementado de 5.008 hectáreas en 2019 a 12.491 hectáreas en 2023, según la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida).