El 29 de setiembre de 2021, la Policía Nacional del Perú (PNP) aprobó un plan estratégico al 2030 para el sector —conocido como Plan Mariano Santos Mateo o Plan MS30—, con el respaldo del Ministerio del Interior. Este proyecto interinstitucional planteó una serie de cambios en la entidad, con el objetivo de potenciar sus distintos niveles y, con ello, mejorar su capacidad en la lucha contra la delincuencia. 

El documento precisa que la cantidad de oficiales y suboficiales de armas —aquellos formados para estar en las calles— apenas alcanzan el 70% de la cantidad ideal. Por este motivo, recomendó una serie de medidas, como adecuar el perfil policial para evitar que, cada año, queden vacantes desiertas, promover la segunda especialización, y mejorar la distribución para evitar un desequilibrio de personal. En otras palabras, no hay ninguna mención a la posibilidad de crear una nueva fuerza de seguridad.

La Policía de Orden tendrá facultades policiales, pero estará al margen de la ley de la carrera policial".

A pesar de eso, el pasado 28 de julio, el Ejecutivo presentó ante el Congreso de la República el proyecto de ley N° 05633, que propone la creación de la categoría de Policía de Orden y Seguridad. La iniciativa —detalló la presidenta Dina Boluarte durante su mensaje a la nación por Fiestas Patrias— se sustenta en el déficit de personal y el aumento de la delincuencia. 

Según los argumentos planteados en el proyecto de ley, el país requiere alrededor de 60.000 policías adicionales a los disponibles actualmente, para cubrir la demanda de seguridad en las calles. 

El ministro del Interior, Vicente Romero, señaló ante la Comisión de Seguridad Ciudadana del Congreso que, con este proyecto, se estima contar con 6.000 nuevos policías de orden y seguridad cada año, dedicados exclusivamente al patrullaje y, así, evitar el robo callejero.

Durante la sustentación de la propuesta, indicó que, según información del INEI, entre diciembre y mayo último, el 25,9% de la población nacional refirió haber sido víctima de un hecho delictivo. De esa cifra, cerca del 70% correspondió a robos (46,1%) e intentos de robo (22,5%) de dinero, carteras y celulares.

COMANDO. La Policía de Orden no tendrá jerarquía ni grado al interior de la Policía. Tampoco se ha precisado cuál será su cadena de mando. 

Documento: Ministerio del Interior.

A pesar de este contexto, especialistas consultados por OjoPúblico señalaron que la posibilidad de que un efectivo no profesional porte un arma y realice intervenciones policiales es demasiado riesgosa, considerando que los agentes de carrera policial ya han evidenciado deficiencias a pesar de su mayor formación. 

Además, cuestionaron que no quede clara la cadena de mando de este nuevo grupo en el ejercicio de sus funciones, específicamente en caso cometan alguna infracción administrativa o un delito.

El proyecto de ley señala que esta nueva fuerza policial tendrá facultades de un suboficial de tercera de armas, el rango más bajo en la Policía, pero con una formación y un sueldo menor al de su par. Esto, destacaron los expertos, podría marcar una gran diferencia en la actuación de los policías de orden, si se considera que están bajo el mismo riesgo, pero con condiciones laborales más desfavorables. 

Asimismo, los especialistas alertaron que esta modalidad podría ser usada por bandas criminales para introducir a sus miembros en la interna de la Policía de Orden y Seguridad. "Se pueden meter a patrullar en la calle y conocer los movimientos de cierta entidad bancaria y, en la noche, regresar [para cometer actos delictivos], además van a tener arma", remarcó Máximo Ramírez de la Cruz, general PNP en retiro y exdefensor policial. 

Vacíos y contradicciones con las normas policiales

En la carrera policial existen cuatro categorías, detalladas en la Ley N° 1149: oficiales de armas, oficiales de servicios, suboficiales de armas y suboficiales de servicios. El personal de armas está formado para estar en las calles, mientras que el personal de servicio se dedica, sobre todo, a funciones administrativas. 

Asimismo, la ley de la carrera policial también establece grados, siendo el alférez el más bajo en la categoría de oficiales de armas, capitán en las categoría de oficiales de servicios, y suboficial de tercera, en las dos categorías de los suboficiales. El proyecto del Ejecutivo, en cambio, plantea crear una nueva categoría, que esté por debajo de las ya existentes, pero sin grados. 

A detalle, la iniciativa establece que la Policía de Orden no pertenece a la carrera policial. Por eso, plantea que, para ellos, no debería regir la estructura de categorías, jerarquía y grados, ni el mismo proceso formativo. No obstante, se indica que sí son miembros de la Policía y, por lo tanto, tienen todas sus facultades de intervención. 

Esta propuesta se contrapone a lo establecido en la Ley General de la Policía Nacional del Perú, N° 1267. La misma señala que “el ejercicio de la función policial requiere conocimientos especializados, los cuales son adquiridos a través de la formación profesional y técnica”.

El proyecto de ley plantea formar a reservistas en seis meses y a egresados de la secundaria en un año".

Además, el proyecto de ley detalla que los miembros de la Policía de Orden y Seguridad tendrán una vinculación contractual con la institución bajo la firma de un contrato de servicios especiales, con una duración de tres años. Al término de este, añade, se podrá renovar por un período más. 

Un policía de orden y seguridad ganará S/2.153,84 mensuales y dos aguinaldos de S/300 al año. Tendrá vacaciones por 30 días al año y podrá afiliarse a la ONP o a la AFP, y también a EsSalud. Es decir, todos los beneficios establecidos en la Ley de Seguridad y Salud de Trabajo N° 29783.

Esta modalidad es distinta a la de un policía de carrera, pues los oficiales y suboficiales cuentan con beneficios a través de entidades autónomas, como el Hospital Policial o la Caja Militar Policial, entre otras. Además, en la práctica, su sueldo es mucho menor de los S/3.000 que gana un suboficial de tercera, haciendo la misma labor en las calles y sometidos al mismo riesgo. 

FORMACIÓN. El Policía de Orden tendrá una formación de seis meses a un año. Mientras que los suboficiales de carrera se forman durante tres años. 

Documento: Ministerio del Interior.

Para ser miembro de la Policía de Orden y Seguridad, indica la iniciativa de ley, se deberá cumplir con los siguientes requisitos: ser peruano de nacimiento, egresado de nivel secundario o licenciado de las Fuerzas Armadas, no contar con antecedentes policiales, penales o judiciales por delitos dolosos. No obstante, no se menciona a los delitos culposos, es decir aquellos que se cometen por negligencia. 

Los aspirantes también deben ser mayores de edad, y cumplir con el peso y la talla mínima (1,67 m para hombres, y 1,59 m para mujeres). Además, deberán superar las pruebas académicas, físicas, clínicas y psicológicas establecidas en la Escuela de Formación Profesional Policial, la misma que forma a los policías de carrera.

Los policías de orden podrán usar armas de fuego y participar de intervenciones como un policía de carrera".

La preparación será de un año para los egresados de secundaria, y de seis meses para los licenciados de las Fuerzas Armadas. Sin embargo, en la carrera policial, los oficiales llevan una formación de cinco años —similar a estudios universitarios—, y los suboficiales lo hacen durante tres años —similar a estudios técnicos—. El proyecto no indica mayores detalles sobre la formación, pero plantea que se tendrá que elaborar un sistema educativo para este nuevo equipo.

Al culminar los tres años de contrato, según la propuesta, los miembros de la Policía de Orden y Seguridad tendrán el beneficio de ingresar directamente a la Escuela de Formación Profesional Policial para completar la carrera policial, en caso deseen. De lo contrario, podrán renovar o retirarse del grupo. En este último caso, se le brindará un certificado de trabajo emitido por la Dirección de Recursos Humanos de la Policía.

OjoPúblico solicitó una entrevista con algún representante del Ministerio del Interior, a través de su área de prensa, para conocer mayores detalles del proyecto de ley. Sin embargo, hasta el cierre de este artículo, la misma no se concretó. 

Los riesgos y las críticas

El general PNP en retiro y exdefensor policial, Máximo Ramírez de la Cruz, señaló que existe una contradicción entre el proyecto de ley y las normas policiales. Por este motivo, en su opinión, los efectivos de orden y seguridad no deberían ser considerados como policías.

“¿Cómo un miembro de la Policía puede estar sin carrera? Es absurdo. Por ahí nomás transgrede la norma de la Policía. Si no formas parte de la carrera policial, entonces no eres policía, eres un empleado civil”, declaró. 

El general Ramírez de la Cruz también cuestionó el poco tiempo de formación que plantea el proyecto de ley para un puesto que va a estar directamente relacionado con la intervención policial y el uso de armas de fuego. 

Si no formas parte de la carrera policial, no eres policía, eres un empleado civil", dijo el general en retiro Ramírez de la Cruz.

“¿Cómo voy a hacer que una persona con formación de seis meses salga a la calle a disparar y a tener un arma? Ellos dicen que serán policías de orden y seguridad, que estarán en la calle solo para hacer presencia, pero van a tener un arma. Si van a usar el arma, qué respaldo jurídico van a tener, si no tienen línea de carrera”, argumentó. 

En esa línea, el director del Instituto de Defensa Legal Policial, Jesús Poma Zamudio, señaló que la norma policial establece que los únicos autorizados para realizar intervenciones son los policías formados en la carrera policial. Es decir, los profesionales.

“Las leyes policiales señalan que toda intervención se debe dar por un policía que tenga carrera policial, que haya sido formado para tal cosa. Si estos policías no han tenido esa formación, entonces su intervención será nula. Ni siquiera un serenazgo tiene esa facultad de intervención. [Estos últimos, por ejemplo,] ni siquiera pueden hacer el control de identidad, porque implica una privación de la libertad temporal. A estos policías de orden sí le están dando esa facultad”, explicó.

CÁLCULOS. El Gobierno estima formar 6.000 policías de orden cada año, a partir de 2024, con un presupuesto de S/49,2 millones anuales. 

Foto: OjoPúblico / Renato Pajuelo

Los especialistas también cuestionan la falta de jerarquía de este grupo, pues la propuesta no señala cuál será su cadena de mando, es decir, quiénes serán los responsables superiores si dichos oficiales cometen alguna infracción o delito. En este sentido, es importante tener en cuenta que los policías de orden y seguridad podrían ser destinados como respaldo en la represión de protestas ciudadanas, ya que serán enviados a comisarías. 

Por otro lado, el general PNP en retiro y actual gerente de seguridad de Comas, Alberto Jordan Brignole, refirió que esta iniciativa es más política que realista. A su entender, la medida será observada por la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), debido a que la norma establece que, para ser policía, se requiere una instrucción adecuada. 

El general PNP en retiro también indicó que no se puede poner a cualquier persona a realizar una actividad para la cual se requiere una formación exigente, por ser una profesión delicada.  

“Esto ha sido manejado con una intención. Tú no puedes meter a cualquier persona sin ninguna formación a ser profesional. Es como si mañana digo que, para ser médico, van a estudiar un año nomás, porque se necesita personal”, agregó. 

Los especialistas cuestionaron que la norma no indique cuál será la cadena de mando de este nuevo grupo policial".

El abogado especialista en normas policiales, Jesús Poma Zamudio, indicó que la modalidad de contratación también podría generar conflicto entre los efectivos profesionales y los nuevos policías de orden y seguridad, pues establece diferencias evidentes. 

“¿En qué institución se da una etapa de prueba de tres años? En ninguna. Ahora, los policías de carrera tienen un seguro de vida de 15 UIT (S/74.250) en caso fallezcan. Pero, para este nuevo grupo, se extinguirá el contrato en caso de fallecimiento. El proyecto también dice que van a elegir entre AFP u ONP, pero los policías de carrera trabajan con la Caja Militar Policial, un sistema distinto. Si yo fuera un policía de orden, diría ‘yo estoy cumpliendo los mismos servicios que un suboficial de tercera, entonces ¿por qué se me hace esa distinción?’”, dijo. 

En contraparte, el exministro del Interior Wilfredo Pedraza Sierra consideró al proyecto del Ejecutivo como una respuesta ante la inseguridad y la falta de presupuesto para realizar las mejoras requeridas al interior de la Policía. Realizar dichos cambios, afirmó en conversación con OjoPúblico, requiere una inyección de dinero a la institución. 

“Otro factor es que no se tiene tanto recursos para formar policías en grandes volúmenes, entonces hay temas de economía de recursos. En el período de [Ollanta] Humala [cuando dirigió la cartera Interior], decidimos potenciar todas las escuelas, les subimos los salarios a los profesores y formamos 10.000 policías cada año, pero significó un inmenso esfuerzo económico. El país no está en condición para ese esfuerzo o no hay voluntad política, no lo sé”, agregó.

Actualmente, según información de la Dirección de Recursos Humanos de la Policía, existen 131.592 efectivos policiales en actividad. De todos ellos, 119.404 son suboficiales de armas y otros 6.678 son oficiales de armas, los profesionales que están formados para el patrullaje. Sin embargo, existen diversas divisiones y, en muchos casos, personal de armas realiza acciones administrativas. 

CIFRAS. Actualmente, existen 131.592 efectivos en actividad, de los cuales 53.995 se encuentran en comisarías en el ámbito nacional. 

Foto: OjoPúblico / Renato Pajuelo

El ministro Vicente Romero indicó, ante el Congreso, que el personal policial en las comisarías suma 53.995 efectivos en el ámbito nacional. No obstante, a raíz de la modalidad de 24x24 (un día de trabajo por uno descanso), la modalidad de ocho horas diarias y los descansos que les tocan por ley, al final quedan disponibles 24.000 policías para atender la inseguridad ciudadana en todo el país.

Además, entre el 2012 y el 2022, según información de la Policía, se han dado de baja a 50.205 efectivos policiales: 44.414 pasaron al retiro por vía regular, 5.013 por procesos disciplinarios y 778 por fallecimiento a causa de la covid-19.

Con este proyecto, el Gobierno planea obtener 12.000 policías cada año, 6.000 bajo la carrera policial y otros 6.000 formados para ser policías de orden y seguridad. Para formar al nuevo grupo policial, según el proyecto de ley, se necesitará un presupuesto de S/49,2 millones cada año.

Entre 2012 y 2022, 50.205 policías fueron dados de baja por diversos motivos".

No obstante, según el Plan MS2030, con la cantidad de personal que ingresa a la Policía de manera anual —un promedio de 6.000 suboficiales y 500 oficiales— se podría cubrir  la brecha en los próximos años, siempre y cuando se realicen otros cambios internos en la Policía para mejorar el ingreso a las escuelas y una mejor distribución interna, que va de la mano con la especialización de los efectivos. 

Actualmente, el proyecto de ley se encuentra en la Comisión de Defensa Nacional, Orden Interno, Desarrollo Alternativo y Lucha Contra las Drogas, que preside la congresista de Avanza País, Patricia Chirinos.

Este medio intentó contactar al presidente de la Comisión Especial Multipartidaria de Seguridad Ciudadana del Congreso, Alfredo Azurin Loayza, para recoger su postura sobre la propuesta. Sin embargo, el congresista no respondió las llamadas hasta el cierre de este informe. 

Otras alternativas frente a la falta de policías

Los especialistas consultados por OjoPúblico reconocieron que existe déficit de personal policial, principal argumento para la creación de la Policía de Orden y Seguridad. Sin embargo, a excepción del exministro Pedraza Sierra, todos plantearon que esta podría ser resuelta con otras medidas diferentes a la creación de un nuevo cuerpo de seguridad.

Máximo Ramírez de la Cruz, general PNP en retiro y exdefensor policial, considera que una de estas alternativas consiste en captar policías en retiro para realizar funciones administrativas. De ese modo, sostuvo, se podría enviar al personal de armas que, actualmente, se encuentra en oficinas a patrullar las calles.

Ramírez de la Cruz explicó que dicho personal conoce los procedimientos policiales y muchos de ellos quieren volver a la institución, pues sus pensiones son mínimas. “Capto a esa gente y los pongo en puntos claves. Por ejemplo, en la región Lima, donde existen muchos suboficiales en la parte administrativa, cuando ellos deben estar en las calles”. 

El general PNP en retiro Alberto Jordan Brignole, por su parte, recomendó trabajar junto con las Fuerzas Armadas, pero no para formar a policías en seis meses, sino a través de una modalidad que garantice su preparación de acuerdo a las normas dictadas por Sunedu. 

Alberto Jordan Brignole, general PNP en retiro, recordó la necesidad de refundar la institución policial y retirar a los malos elementos".

“En las mañanas se haría el servicio militar y, en la tarde, la academia para la Policía. Culmina ese primer año, los mejores pasan, y, en el segundo año, siguen haciendo su servicio militar y, en la tarde, van a la escuela técnica policial. En el último año, los mejores pasan a la escuela técnica de policías, donde le vas a terminar de dar el bagaje que necesitan. Así se cumplen los tres años”, opinó. 

Además, Jordan Brignole destacó la necesidad de refundar la institución policial y retirar a los malos elementos. También consideró que el dinero que se piensa destinar a la creación del nuevo grupo de seguridad debería emplearse para equipar a la Policía logística y tecnológicamente. 

Por último, el director del Instituto de Defensa Legal, Jesús Poma Zamudio, recomendó mejorar el acceso a las escuelas de la Policía para los licenciados de las Fuerzas Armadas y el personal de serenazgo.

El especialista explicó que estos podrían tener facilidades, modificando los perfiles que, actualmente, tiene la Policía, como los vinculados a la talla y el peso, para captar a más gente. Una propuesta de este tipo, apuntó, permitiría una mayor dotación de suboficiales de tercera. Todo ello sin crear una nueva fuerza de seguridad sin carrera policial, que requiere modificar todas las normas del sector.