Los resultados de la pobreza de 2023 vinieron cargados de denuncias de un presunto intento de censura por parte del Gobierno. Luego de una repentina cancelación de la presentación de estos indicadores, donde iban a exponer especialistas en la materia, el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) publicó, finalmente, el informe Perú: Evolución de la pobreza monetaria 2014-2023. 

Las cifras evidencian un recrudecimiento de la pobreza durante la gestión de Dina Boluarte, en un contexto de recesión económica marcado por la crisis política y el debilitamiento democrático: el 29% de la población peruana cayó en esta condición en 2023. Esta cifra es 1,5 puntos porcentuales mayor a lo registrado en 2022 (27,5%) e implica un crecimiento de la pobreza por segundo año consecutivo. 

Esta tendencia al alza no se registraba, por lo menos, desde hace dos décadas y se traduce en más de medio millón de personas que cayeron en esta condición en solo un año. En total, al cierre de 2023, 9,7 millones de personas no tenían ingresos suficientes para cubrir su canasta básica de alimentos ni pagar servicios esenciales. Esto equivale a uno de cada tres peruanos.

Si se comparan con 2019, los datos de 2023 son 8,8 puntos porcentuales más altos. En otras palabras, hay 3,2 millones más personas en condición de pobreza que en la prepandemia. 

Los integrantes de la Comisión Consultiva para la Estimación de la Pobreza, Carolina Trivelli Ávila y Javier Herrera Zúñiga consultados por OjoPúblico coinciden en que lo más preocupante es la cifra de pobreza extrema: casi 2 millones de personas no tienen suficiente dinero para cubrir, siquiera, los costos de sus alimentos (S/251 por persona al mes). 

"Más de 9,7 millones de personas no tienen ingresos suficientes para cubrir sus alimentos y servicios esenciales"

La pobreza extrema subió de 5%, en 2022, a 5,7%, el año pasado. Esto significa que hay 249.400 personas más viviendo en esta precaria condición. Si se comparan estas cifras con las de 2019 (2,9%), la variación es de 2,8 puntos porcentuales. Esto implica 911.000 personas más afectadas que en la prepandemia.

“Ha aumentado la pobreza extrema, tanto en el ámbito urbano como rural. Es decir, los hogares pobres se han hecho aún más pobres al punto de que ahora sus recursos no les alcanza ni para comprar la canasta básica de alimentos”, explica Herrera Zúñiga.

La tasa de 5,7% de la pobreza extrema en 2023 es la más alta en 11 años, incluso superior a lo registrado en la pandemia (2020) cuando llegó a 5,1%. 

Además, el informe del INEI reporta que otro 31,4% de la población de Perú está en riesgo de caer en pobreza. En cifras absolutas, esto equivale a 10,5 millones de ciudadanos.

Por área de residencia, la pobreza afectó al 39,8% de la población rural y al 26,4% del área urbana. Las regiones con mayor incidencia fueron Cajamarca, Loreto, Pasco, Puno, Huancavelica, Ayacucho y Huánuco. 

Con estos resultados, Trivelli Ávila estima que Perú ha retrocedido 13 años en la lucha contra la pobreza. Esto teniendo en cuenta que, sin contar al 2020 —cuando la pobreza se disparó al 30,1% por el inicio de la pandemia—, los indicadores son similares a los reportados en 2010, cuando la pobreza afectó al 30,8% de peruanos. 

Antes de la emergencia sanitaria, Perú experimentaba una reducción progresiva de la pobreza y, en 2019, la tasa estaba en 20%. Aunque al año siguiente —el primero de la pandemia— la cifra se disparó al 30,1%, en 2021, se redujo al 25,9%. Sin embargo, al año siguiente, la población afectada volvió a subir (27,5%) y los resultados de 2023 (29%) confirman una nueva tendencia al alza. 

El exministro de Economía David Tuesta Cárdenas señaló, en su cuenta de X, que, si se toma en cuenta las proyecciones del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) sobre un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) de 3% anual, al país le tomará 20 años regresar a la tasa de pobreza de 2019. 

 

Las zonas más afectadas 

Si se analizan los resultados por área, en 2023, la pobreza afectó al 39,8% de la población rural y al 26,4% del área urbana de Perú. 

Javier Herrera Zúñiga enfatiza que en los últimos cinco años, desde 2019, principalmente es la pobreza urbana la que viene en aumento, pero que desde el Gobierno no se ha dado ninguna atención a este grupo. "No existe el diagnóstico ni estrategia de instrumentos y, por consecuencia, se ven estos resultados", acotó. 

Carolina Trivelli Ávila explica que la mayor proporción [de nuevos pobres] se concentró en el “resto urbano”. Es decir, el conjunto de centros poblados con más de 2.000 habitantes sin contar a Lima y Callao. Entre estos, los que registraron mayor impacto son la “selva urbana” y la “costa urbana”.

En cuanto a la pobreza extrema, el INEI reporta que la rural pasó de 14,6% a 16,2% y la urbana de 2,6% a 3,2%. Según región natural, la más afectada fue la sierra, con el 10,4% de su población. Le sigue la selva, con 8%, y la costa, con 2,7%. 

Si se analiza por regiones, 10 presentan una incidencia mayor al promedio nacional. Asimismo, cuatro de ellas reportan cifras superiores al 40%. La más afectada es Cajamarca, con el 44,5% de su población en condición de pobreza. 

Luego, se encuentran Loreto (43,5%), Pasco (41,7%), y Puno (41,6%). Le siguen Huancavelica (39,5%), Ayacucho (39,4%), Huánuco (39,2%), Callao (34,2%), Piura (33,1%) y La Libertad (31,6%). 

MAPA DE POBREZA. Las regiones más afectadas son Cajamarca, Loreto, Pasco, Puno, Huancavelica, Ayacucho y Huánuco. 

Fuente: INEI

Un repentino cambio de planes

La presentación de las cifras de pobreza de 2023 estaba prevista para este 9 de mayo a las 11:00 a.m. De acuerdo a información del INEI, la actividad iba a estar a cargo del jefe del instituto, Peter Abad Altamirano, y del representante de la Comisión Consultiva para la Estimación de la Pobreza, Federico Arnillas Lafert. 

Además, se anunció la participación de Fanny Montellanos Carbajal, viceministra de Políticas y Evaluación Social del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) y de dos especialistas: Javier Herrera Zúñiga, director de investigación del Instituto de Investigación para el Desarrollo (IRD-Francia), y Carolina Trivelli Ávila, investigadora principal del Instituto de Estudios Peruanos (IEP). 

Sin embargo, la noche anterior, el INEI publicó un comunicado en el que anunció la suspensión de la presentación por motivos de “fuerza mayor”. 

Según fuentes de OjoPúblico, el pedido de la cancelación del evento se dio después de la presentación de los resultados, por parte del jefe del INEI, ante la mandataria Dina Boluarte y al resto del gabinete, en una sesión de Consejo de Ministros del 8 de mayo. 

El INEI canceló el evento de presentación de los resultados de la pobreza 2023 por motivos 'de fuerza mayor'". 

La postergación de la actividad fue cuestionada por diversos académicos, congresistas y población en general, quienes exhortaron al INEI —a través de reclamos en redes sociales— a cumplir con la publicación del reporte. Finalmente, este 9 de mayo, la entidad técnica publicó el informe Perú: Evolución de la Pobreza Monetaria 2014-2023 en su página web, pero sin el evento previsto originalmente. 

En ese contexto, la congresista Sigrid Bazán (Cambio Democrático) presentó un oficio con carácter de urgencia a la Presidencia del Consejo de Ministros para que explique las razones que motivaron a frenar —en un primer momento— la publicación del informe y pidió el acta de la última sesión de Consejo de Ministros.

La parlamentaria también solicitó al presidente de la Comisión de Economía del Congreso, César Revilla Villanueva (Fuerza Popular), que se cite con carácter de urgencia al jefe del INEI, Peter José Abad Altamirano, para que detalle los motivos de "fuerza mayor" que justificaron la suspensión del evento.