Los partidos políticos del Perú recibieron casi S/.100 millones como financiamiento por las campañas electorales entre los años 2006, 2011 y 2016, concluyó Ojo-Publico.com, luego de construir una base de datos con la información sobre el financiamiento privado de estas organizaciones en la última década.

Fondos de Papel -como llamamos a esta plataforma sobre las finanzas partidarias en el país- se creó a través de pedidos de transparencia, extracción de data de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y cruce con una decena de otras bases de datos que permitieron el análisis masivo de más de 3 millones de registros.

Los S/.99.4 millones declarados por estas organizaciones a la ONPE fueron distribuidos de la siguiente manera: en el 2006 (S/.26,8 millones), en el 2011 (S/.63,2 millones) y en la etapa inicial del 2016 (S/.9,4 millones). El monto correspondiente a la campaña actual se espera que aumente en los próximos meses, así como rumbo a los comicios de la segunda vuelta.

ELECCIONES 2011. Entre la primera y la segunda vuelta, que disputaron Keiko Fujimori y Ollanta Humala, los partidos recibieron S/.63,2 millones.

Ojo-Publico.com solicitó a la ONPE copia de los comprobantes utilizados por los partidos para justificar el ingreso de sus millonarios aportes, pero contestaron que no tenían dicha información. Aún cuando existen cuestionamientos sobre los verdaderos financistas y los montos reales que se invierten, los S/.99 millones declarados como ingresos en estas tres campañas son el punto de partida inicial para la extensa investigación que presentamos.

Esta cantidad de dinero -equivalentes a unos US$30 millones- son insignificantes si los comparamos con el patrimonio de los multimillonarios peruanos de la lista de Forbes, con los US$114 millones incautados a Vladimiro Montesinos en cuentas bancarias de Suiza, los US$47 millones que recibió la candidata Hillary Clinton en la primera parte de su actual campaña y con los 11.000 mil millones de dólares que se han lavado en el país entre el 2007 y el 2009, asociados al narcotráfico y la minería ilegal, según la Unidad de Inteligencia Financiera. 

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