COP15: Protección del planeta y financiamiento son temas claves para América Latina

La Conferencia de las Partes del Convenio sobre la Diversidad Biológica, una cumbre mundial en la que se adoptan acuerdos sobre la biodiversidad entre más de 190 países, se está llevando a cabo en Montreal, Canadá. Este año uno de los principales temas en discusión consiste en la protección del 30% de la Tierra para el 2030, que incluiría como un ecosistema crucial a la Amazonía. Existe un consenso mayoritario en que esta debería ser la meta global para asegurar la supervivencia del planeta. Sin embargo, la falta de detalle sobre qué es lo que se va a proteger y de qué manera ha alargado las negociaciones. Además de ese objetivo, hay otros 22 discutidos en la conferencia. Entre los más relevantes para América Latina está el pedido de mayor financiamiento.

PRIMATES AMENAZADOS. Mono ardilla (Genus Saimiri), especie que habita en la Amazonía peruana.

PRIMATES AMENAZADOS. Mono ardilla (Genus Saimiri), especie que habita en la Amazonía peruana.

Foto: Shutterstock

Cada dos años, desde 1992, se celebra la Conferencia de las Partes (COP) del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB, por su sigla en inglés) de las Naciones Unidas. Este evento mundial es menos conocido que la cumbre sobre cambio climático, pero tiene tanta relevancia como esta última para el futuro del planeta. La 15° edición de la conferencia se realiza dos años después de lo previsto, debido a la pandemia de covid-19.

La COP15 es un evento en el que participan representantes de gobiernos, especialistas y miembros de la sociedad civil de más de 190 países para tomar decisiones relacionadas a tres ejes temáticos claves. Los mismos comprenden la conservación de la diversidad biológica, la utilización sostenible de los componentes de esa diversidad biológica, y la participación justa y equitativa de los beneficios que se deriven de los recursos genéticos.

Estos temas se abordan en reuniones que giran en torno a tres acuerdos internacionales, los cuales fueron suscritos por Perú. El primero de ellos es el CDB, que fue firmado en 1992 por 195 partes, sin incluir a Estados Unidos. El segundo es el Protocolo de Cartagena, que entró en vigencia en 2003 y cuenta con la participación de 173 naciones. El tercero se trata del Protocolo de Nagoya, que data del 2014 y fue ratificado por 138 partes.

Las negociaciones sobre financiamiento son las que más tiempo toman y presentan mayores discrepancias".

Este año, la cumbre —copresidida por los gobiernos de China y Canadá— tiene el objetivo de que los países firmen un acuerdo con nuevos compromisos para hacer frente a la pérdida de biodiversidad. La urgencia de las discusiones, que se llevan a cabo desde el 7 de diciembre y seguirán hasta el lunes 19 de este mes en Montreal (Canadá), reside en que, como reportó el CBD, nada de lo pactado en el acuerdo de 2010, denominado Metas de Aichi, fue cumplido por las partes.

“Lo que se está discutiendo aquí, en Montreal, es el nuevo marco estratégico para la conservación, uso sostenible y restauración de la diversidad biológica. Como parte del grupo de los países en desarrollo estamos apuntando a la aprobación de un marco estratégico, con objetivos más ambiciosos que los que se tuvo anteriormente, en las Metas de Aichi”, explicó Gabriel Quijandría, director regional para Sudamérica de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), a OjoPúblico.

El borrador del acuerdo final, denominado Marco Global de Biodiversidad Post-2020, está siendo discutido en este momento por las partes —196 en total, considerando a la Unión Europea—. Dicho texto tiene el objetivo de ser el equivalente al Acuerdo de París para las cumbres sobre cambio climático.

Es decir, convertirse en el acuerdo que rija las acciones de todos los países en materia de diversidad y que las siguientes reuniones sean solo para evaluar los avances. Aunque existe una diferencia clave: este documento no es vinculante, por lo que los países no tienen la obligación de cumplir con lo acordado.

A pesar de ello, las naciones son optimistas respecto a los alcances de este nuevo marco. El texto incluye 22 objetivos con acciones precisas respecto a cuatro grandes temas: ecosistemas, especies y diversidad genética; contribuciones de la naturaleza a las personas; acceso y distribución de beneficios, y medios de implementación.

"Lo que estamos viendo esta vez, en comparación con 2010, es una atención aún más seria sobre la necesidad de recaudar recursos para apoyar la implementación", dijo David Cooper, secretario ejecutivo adjunto del CDB, en una conferencia de prensa.

Foto: COP15

OBJETIVO COMUNES. Organizaciones civiles, representantes de gobiernos y especialistas participan de la cumbre de biodiversidad.
Foto: ONU/COP15

 

Sin embargo, hasta el cierre de este informe, solo tres de los 22 objetivos habían sido acordados por unanimidad: el de conocimiento tradicional, educación e investigación; el de participación equitativa y efectiva en la toma de decisiones, y el de igualdad de género. En tanto, 19 objetivos aún no se habían cerrado debido a diferencias entre los países, cuyas agendas tienen discrepancias.

Para Latinoamérica, algunos de los puntos más importantes este año son la protección del 30% del territorio terrestre y del marítimo, la cual incluiría ecosistemas sensibles como la Amazonía.

Los países de la región también priorizan temas como la equidad entre jóvenes, líderes indígenas y comunidades locales; la agricultura sostenible, y, sobre todo, el financiamiento para que los países en desarrollo elaboren e implementen planes que les permitan cumplir esos nuevos objetivos.

En tanto, los países desarrollados coinciden en la importancia de la meta del 30% y la inclusión equitativa de todas las comunidades, pero muestran reticencias en torno a las propuestas de incrementar, duplicar o crear nuevos fondos de financiación.

Las negociaciones en esta cumbre, como en la COP27, también se realizan por bloques de países. Las naciones de América Latina están agrupadas principalmente en dos.

Como países en desarrollo estamos apuntando a objetivos más ambiciosos”, explicó Gabriel Quijandría.

Por un lado, el grupo de los países megadiversos, integrado por Bolivia, Brasil, China, Costa Rica, Colombia, Ecuador, India, Indonesia, Kenia, México, Malasia, Perú, Filipinas, Sudáfrica y Venezuela.

Por otro lado, está la agrupación de países en desarrollo afines sobre biodiversidad y desarrollo, que está integrada por Argentina, Bolivia, Brasil, Cuba, República Dominicana, Ecuador, Guatemala, India, Pakistán, Venezuela y el Grupo Africano.

A un día de que la COP15 terminé de manera oficial, las negociaciones aún continúan con arduas conversaciones entre las partes. Hasta el inicio de esta semana, el borrador final presentaba muchos temas por resolver. Ello se refleja en la cantidad de corchetes dentro del documento presentado al inicio de la cumbre: 719.

“En junio, teníamos un texto con 820 corchetes. En setiembre, esa cantidad se redujo un 40%. Antes del inicio de la conferencia, volvió a aumentar. Hoy no puedo decir cuántos hay, pero sí que los corchetes se están reduciendo día a día”, dijo Elizabeth Maruma, secretaria ejecutiva del CBD, en una conferencia de prensa, el lunes 12 de diciembre.

 

Aún no hay consenso sobre el 30x30

 

Uno de los principales objetivos de esta cumbre es la protección del 30% de la superficie terrestre y marítima para el 2030. La propuesta, conocida como 30x30, tiene como base las investigaciones del científico Edward O Wilson. De acuerdo con su reporte, la protección del 30% del planeta es lo mínimo que se debe alcanzar para asegurar la supervivencia de la humanidad a largo plazo.

“El 30% es lo mínimo. La ciencia dejó en claro qué, dónde y cómo protejamos esas áreas también es esencial”, resaltó Zakri Abdul Hamid, científico y fundador de la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (Ipbes, por su sigla en inglés).

En efecto, a lo largo de la cumbre de biodiversidad, hubo discusiones sobre cómo se va a implementar esto. Los líderes indígenas mostraron su preocupación por que esta medida afecte sus derechos sobre sus territorios.

El mundo no sería capaz de lograr 30x30 sin los pueblos indígenas”, remarcó Jennifer Corpuz.

Como informó meses atrás OjoPúblico, una investigación de la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (Raisg) evidenció que los pueblos indígenas protegen casi el 80% de la biodiversidad del mundo, pero solo cuentan con el reconocimiento del 20% de sus tierras.

“El mundo no sería capaz de lograr 30x30 sin los pueblos indígenas”, remarcó Jennifer Corpuz, representante del Foro Indígena Internacional, en una conferencia en la COP15.

Aunque la inclusión de las comunidades indígenas en el acuerdo final es clave para la conservación de la biodiversidad, los esfuerzos por incluirlos en las conversaciones sobre este tema son escasos. En este contexto, los líderes no tienen ninguna representación en las negociaciones.

Además, un informe del CDB sobre el estado de las áreas protegidas —preparado por la secretaría ejecutiva de la convención— no tomó en cuenta a los pueblos indígenas en la restauración de tierras degradadas y la conservación de los recursos genéticos.

A este pedido también se suman las discusiones sobre cuáles serán las áreas a proteger dentro de ese 30%. Las propuestas incluyen las “áreas clave de biodiversidad”, “áreas de importancia ecológica o biológica”, “ecosistemas amenazados” o ninguna de ellas y solo proteger el 30% de un área sin ninguna denominación.

Un estudio, publicado en Nature en noviembre de 2021, proporcionó mapas de los ecosistemas que no se deberían destruir. Entre ellos se encontraban los bosques tropicales de la Amazonia, la cuenca del Congo e Indonesia. Sin embargo, hasta el cierre de este informe, no había consenso sobre este objetivo, que es el número 3.

Líderes indígenas. biodiversidad. Foto: COP15

JUSTO. Líderes indígenas estuvieron presentes en la COP15 para exigir que se considere los conocimientos ancestrales y que no se afecten sus derechos. 
Foto: ONU/COP15

 

 

Sin financiamiento no habrá avances

 

El cumplimiento del objetivo 30x30 y de los 21 restantes requieren de dinero para su implementación. En la apertura de la cumbre, el grupo de países megadiversos dejó en claro que necesitarían dinero y asesoramiento técnico para lograr la protección del 30% de la Tierra.

En la propuesta del Marco Global de Biodiversidad Post-2020, presentada durante la mañana del sábado 17 de diciembre, el tema de financiamiento corresponde al objetivo 19 y se divide en dos puntos: uno vinculado a flujos financieros, y el segundo relacionado a estimular la cooperación científica, la transferencia de tecnología de investigación y el desarrollo de capacidades.

A un día de que la COP15 terminé, las negociaciones aún continúan con arduas conversaciones entre las partes".

El primero, a su vez, está subdividido en ocho. Entre ellos destacan un incremento del financiamiento para la preparación e implementación de los planes nacionales de biodiversidad, así como la mejora del papel de las acciones colectivas, incluidas las de los pueblos indígenas y locales. Los otros seis puntos todavía estaban en discusión.

Las negociaciones sobre financiamiento, como en la cumbre de cambio climático, son las que más tiempo toman y presentan mayores discrepancias. Gabriel Quijandría, quien estuvo en la COP15 hasta el viernes pasado, explicó que, aunque los países desarrollados están de acuerdo con asumir compromisos más ambiciosos, no se mostraron muy comprometidos a proporcionar más recursos económicos a los países desarrollados.

El especialista detalló que tampoco había una propuesta clara sobre transferencia de tecnología o medios de implementación que ayuden a los países en desarrollo a cumplir con las nuevas metas. “Es ahí dónde ha estado trabado el tema de financiamiento [en la segunda semana de la COP15]”, precisó.

 

Más de 20 objetivos para proteger el futuro

 

Aunque los 22 objetivos del nuevo marco estratégico de biodiversidad no acaparen el mismo nivel de atención, todos se discuten en paralelo y deben ser aprobados a más tardar el lunes 19 de diciembre. Otro de los temas más importantes para Latinoamérica es la propuesta de reducir a la mitad la huella de producción y consumo.

De acuerdo con un análisis de la organización Carbon Brief, Perú y Colombia son algunos de los países que tienen a este tema como una de sus prioridades. Este objetivo apunta a cambios en las formas de producción, consumo y actividades socioeconómicas para reducir los impactos en la naturaleza.

Foto: COP15

NEGOCIACIONES. Las delegaciones de América Latina impulsan temas como financiamiento y la importancia de los pueblos indígenas. 
Foto: ONU/COP15

 

Asimismo, un segundo tema de interés a nivel regional está vinculado a la agricultura sostenible. Colombia ha mostrado su apoyo a que los países incorporen el concepto de agroecología como uno de los pilares en el sector. No obstante, países como Brasil y Argentina han sido identificados por Carbon Brief como los principales opositores de la región.

Por último, el nuevo marco estratégico incluye un objetivo vinculado a la información de secuencia digital (DSI, por su sigla en inglés) sobre los recursos genéticos. El mismo busca establecer el acceso, a través de una base de datos, a los códigos genéticos de especies de todo el mundo. Sin embargo, aún hay discusiones en torno a cómo se usarán esos datos y quiénes serán los beneficiados.

 

****

Este artículo fue creado en el marco del proyecto "COP 15 a la lente".

Reloj Se ha añadido un artículo a su lista de lecturas

Noticias Relacionadas