La Haya. Los representantes de las comunidades indígenas de los ríos Corrientes, Marañón, Tigre y Pastaza en Loreto presentarán este miércoles 11 una queja contra la matriz de la compañía Pluspetrol, ubicada en la ciudad de Ámsterdam y con operaciones en la Amazonía a través de sus filiales en Perú, ante el gobierno de los Países Bajos. La queja exige que esta empresa asuma su responsabilidad por la contaminación de territorios ancestrales y presuntas afectaciones a la salud ocasionados por sus operaciones en el Lote 192, entre los años 2000 y 2015. 

Un equipo de OjoPúblico acompañó a uno de los dirigentes indígenas, Aurelio Chino Dahua, actual presidente de la Federación Indígena Quechua del Pastaza (Fediquep), en su recorrido desde el distrito de San Lorenzo, en Loreto, hasta la ciudad de La Haya, en Países Bajos, donde presentará una queja en representación de las 98 comunidades indígenas afectadas por las operaciones de Pluspetrol hasta 2015.

“Estamos buscando cómo hacer responsable a [Pluspetrol]. Ha dañado muchos recursos que existen dentro de nuestro territorio y la vida de nuestras personas”, contó Aurelio Chino en entrevista con nuestro medio en San Lorenzo, días antes de viajar a Lima para el posterior vuelo hacia Ámsterdam. La queja tiene como objetivo que Pluspetrol asuma su responsabilidad “por la degradación de 1.963 sitios contaminados”.

El documento además asegura que Pluspetrol utiliza “una estructura corporativa artificial”, que es encabezada por una matriz en la capital de los Países Bajos y sociedades offshore en paraísos fiscales como las Islas Caimán y Luxemburgo. Según el documento al que tuvo acceso OjoPúblico, estas estructuras que incluyen “empresas de buzón” -llamadas así porque no registran empleados- suelen ser utilizadas “para eludir el pago de impuestos”.

El documento será entregado al Punto de Contacto con la OCDE del gobierno holandés, una entidad que se encarga de velar por el cumplimiento de las lineamientos de este organismo para empresas multinacionales, y resuelve quejas presentadas sobre compañías específicas, como es el caso de Pluspetrol. Las federaciones indígenas identificaron cuatro acciones de la compañía que rompen las directrices de la OCDE para multinacionales.

ACTUALIDAD. Este 2020 se cumplen cinco años desde el retiro de las operaciones de Pluspetrol en el Lote 192 y las comunidades indígenas piden que se ejecute un plan de remediación por las actividades que tuvo la compañía con sede en Holanda. 

Foto: Andina.

Pluspetrol, según la queja revisada por OjoPúblico, no realizó “una debida diligencia ambiental”, que ha causado y contribuído de manera significativa a los impactos ecológicos negativos, que además no han sido remediados por la compañía. La empresa con sede en Ámsterdam tampoco realizó este mismo procedimiento para prevenir un impacto en los derechos humanos de las poblaciones indígenas en los alrededores del actual Lote 192. 

Por otro lado, la queja indica que Pluspetrol utilizó una estructura y estrategias de elusión tributaria, que incluye sociedades offshore. Finalmente, las federaciones denuncian que la compañía no ha revelado información clave sobre sus estructura corporativa y operaciones.

Además de Fediquep, la queja es presentada formalmente por la Federación de Comunidades Nativas de la Cuenca del Corrientes, la Organización de Pueblos Indígenas Kichwas Amazónicos Fronterizo Perú Ecuador, y la Asociación Cocama de Desarrollo y Conservación San Pablo de Tipishca. Además, contó con el respaldo de Perú Equidad, Oxfam Perú y el Centro de Investigación sobre Corporaciones Multinacionales (SOMO), esta última con sede en los Países Bajos.

VIAJE. El dirigente indígena Aurelio Chino en tren rumbo a la ciudad de La Haya, en los Países Bajos, donde presentará la queja contra Pluspetrol este miércoles.

Foto: OjoPúblico / Ernesto Cabral. 

Pluspetrol operó el Lote 192 de Loreto, en ese entonces denominado 1AB, desde que recibió la concesión de esta área petrolera durante el gobierno de Alberto Fujimori en el año 2000. En agosto de 2015, luego de quince años de operaciones y al término del contrato de concesión del lote, Pluspetrol se retiró de la zona. 

Desde ese entonces, las federaciones indígenas de los ríos Corrientes, Tigre, Pastaza y Marañón han solicitado al Ministerio de Energía y Minas que Pluspetrol ejecute un plan de remediación por los impactos ambientales, hechos que también fueron reportados por OjoPúblico el 2016. Hasta el momento, el Gobierno peruano no ha aprobado el plan de abandono de Pluspetrol, mientras que esta concesión es operada hoy por la compañía de capitales canadienses Frontera Energy Corporation.